El merendero “Tu Mirada” de Ciudad Evita necesita ayuda

La adolescente fue asesinada en noviembre de 2011. Su familia emprendió un proyecto destinado a brindar contención a los chicos del complejo habitacional Villegas. Más de  50 chicos se acercan diariamente a tomar la merienda. Necesitan ayuda para continuar con la tarea solidaria.

Por Soledad Martínez

smartínez@periodicosic.com.ar

 

El 30 de enero último, día en que Claudia Molina cumpliría 17 años, su familia inauguró el merendero “Tu Mirada”, en homenaje a la adolescente que fue asesinada el 22 de noviembre de 2011 por los padres de una amiga, de quien se había distanciado tras varias discusiones.

La iniciativa solidaria tiene como objetivo, brindar contención a los chicos del complejo habitacional Villegas, ubicado en Av. Crovara y Homero, en Ciudad Evita.

Para concretar el proyecto, la familia de Claudia reformó el garaje de la casa, en el que ahora funciona el merendero. “La inauguración fue espectacular, vinieron más de cien chicos, pero necesito mucha ayuda para continuar”, enfatizó Marcela Molina, hermana de Claudia y principal promotora del merendero.

Molina explicó que, si bien recibió mercadería de la Secretaría de Desarrollo Social de La Matanza, necesitará mucho más para cubrir las necesidades de los chicos que asisten al merendero.

“Desarrollo (por la Secretaría de Desarrollo Social) me ayuda, pero es muy poco lo que me dio y no llego ni a los 15 días, no me quejo, pero no llego”, manifestó Marcela. En ese sentido ejemplificó: “Me dio 10 kilos de azúcar y yo uso 2 kilos por día, así que solo me alcanza para una semana, igual que las galletitas de agua y la mermelada, por eso necesito ayuda”.

Marcela cuenta con la colaboración de ocho amigas que se sumaron al proyecto como voluntarias. Según contó, su hermana era “muy solidaria”, y había manifestado su deseo de abrir un comedor.

Desde el 30 de enero, al merendero “Tu Mirada” asisten alrededor de 50 chicos todos los días. Para que los pequeños puedan tener su merienda, es por eso que la familia de Claudia necesita leche, azúcar, chocolate, harina y aceite (para hacer pan).

Además, para agilizar y mejorar la atención a los chicos, precisan una cocina y una heladera. “Por el momento vamos juntando en la familia para comprar lo que necesitamos y estamos trabajando a full para conseguir ayuda”, dijo Marcela Molina. El e desde la Secretaría de Desarrollo Social de La Matanza, no aprobaban el espacio físico en el que se funciona el merendero.

inicio del proyecto, también tuvo sus dificultades, debido a que desde la Secretaría de Desarrollo Social de La Matanza, no aprobaban el espacio físico en el que  funciona el merendero.

De hecho, las noticias no eran las más alentadoras tras la primera inspección realizada por una asistente social: el garaje no era considerado apto para que allí funcionar. Por lo tanto, Marcela y su familia debieron realizar algunas modificaciones y lograron adaptar el lugar a los requisitos que el establecimiento tenía que cumplir para ser habilitado.

La familia Molina emprendió un proyecto solidario con el objetivo de homenajear a Claudia. Si bien ese proyecto se concretó, ahora se encuentran con una gran dificultad: garantizar que todas las tardes los chicos podrán tener su merienda.

Es por este motivo que Marcela pide colaboración tanto a entes públicos, como privados y de todos aquellos que puedan acercar su ayuda. Para juntar fondos que posibiliten la continuidad del merendero, la mujer también organizará rifas y bingos.

Una vez que pueda garantizarse la provisión de los alimentos para el merendero, el objetivo es ofrecer a los chicos del barrio, la posibilidad de recibir apoyo escolar y de asistir a diversos talleres.

“La verdad, estoy un poco ‘bajoneada’, y no quiero cerrar el merendero en un mes. Se hace muy difícil conseguir algo si no trabajas políticamente”, se lamentó Marcela, quien utiliza parte del sueldo que gana trabajando en un taller de calzados, para comprar galletitas y facturas para los chicos que asisten al merendero.

Cabe recordar que este proyecto comenzó a gestarse tras nueve meses de transcurrido el crimen de la adolescente que fue apuñalada por Cintia Aguirre, con la complicidad de Gustavo González, padres de una ex amiga de Claudia, con quien había tenido varias discusiones. La pareja estuvo prófuga de la justicia hasta que fueron capturados en la provincia de Corrientes. Ambos permanecen presos a la espera del juicio oral.

Deja una respuesta