La nueva normativa encargada de regular los medios de comunicación comenzará a regir a partir del próximo 10 de diciembre, el siete caerá el recurso de amparo presentado por el grupo Clarín y que inhabilita la vigencia del artículo 161 que establece la desinversión por parte de los medios que tienen más licencias que las permitidas por la nueva norma. En este marco, especialistas en el tema debatieron en el SUTEBA local, sobre los alcances de la nueva Ley.
«Ignoran que la multitud no odia, odian las minorías, porque conquistar derechos provoca alegría, mientras perder privilegios provoca rencor”, (Arturo Jaureche).
Por: Ángela Tobar.-
atobar@periodicosic.com.ar
En menos de un mes entrará, completamente, en vigencia la ley 26522, de Servicio de Comunicación Audiovisual que remplazará la ley de radiodifusión 22285, de la época de la dictadura. La nueva ley de medios fue aprobada en el 2009 y por una medida judicial presentada por el grupo Clarín se encuentra trabada. El próximo 7 de diciembre caerá ese recurso judicial lo que implica que la nueva ley pueda cumplirse, y los grandes medios de comunicación inicien el proceso de desinversión.
Nuevas voces, nuevas miradas, nuevas propuestas de comunicación y un amplio abanico de sectores sociales, estudiantiles y pueblos originarios están en vigilia para poder comenzar a crear un nuevo modelo de comunicación, más abarcativo y plural.
En este marco, se realizó la semana pasada en el Suteba local una charla sobre los alcances de la nueva ley de medios, en la que participaron el titular de la CTA, Hugo Yasky, el filosofo integrante de Carta Abierta, Ricardo Foster, Lorena Pokoit García de la Corriente Peronista Nacional, el dirigente de MILES, Luis D´Elía y el coordinador de la aplicación de la ley de medios en el conurbano sur, Abel Ramírez.
Por su parte Ramírez, designado por Martín Sabbatella como coordinador de la aplicación de la ley de medios en el conurbano Sur, remarcó que “hay una masiva repercusión de la sociedad que nos lleva a un consenso muy fuerte, porque llegado el momento habrá que tomar decisiones muy fuertes para la próxima etapa”.
Luego repasó aspectos de la ley y recalcó que esta normativa “es integradora, democrática en la que participó gran parte de la sociedad. Esta Ley garantiza la participación de organizaciones, cooperativas para la prestación de servicios públicos y en ella ponemos un punto de apoyo para tener más presencia y más voces de las que tenemos ahora”.
Y destacó la libertad y transparencia de la nueva ley al compararla con la ley de radiodifusión de la época de la dictadura al mencionar que “en el órgano asesor en la Ley de la dictadura lo representaba cada Ministerio además de la Secretaría de inteligencia del Estado”.
Más adelante en su discurso expresó que “toda la etapa de trabajo que termina con la ley de medios indica que son muchos los actores que pueden participar, la provincia, los municipios, el sector privado, los gremios, el tercer sector y los pueblos originarios. Todos estos espacios están funcionando de manera ordenada para la concreción y aplicación de la ley”.
“Cada comunidad debe tener su medio de comunicación, hay una enorme responsabilidad de generar ámbitos de participación social. Tenemos la certeza de que cuando uno empieza a liberar las palabras y las voces comienzan a liberar la patria”, explicó.
En lo referente al articulo 161 cuestionado por el grupo Clarín, sentenció que “no puede haber multiplicidad de licencias, la ley garantiza cuál es el límite que debe haber, no puede haber un grupo que con su poder económico condicione absolutamente el desarrollo de la información”.
A su turno, Ricardo Foster filosofo de Carta Abierta argumentó que “el presente define las condiciones del pasado y crea las oportunidades del futuro. Me interesa la ley como un núcleo de disputa política de disputa cultural, se continúa profundizando un proyecto de transformación del país, debemos entender que si nos secuestran la palabra nos secuestran el alma”.
Y agregó: “La disputa debe tener conciencia, de la palabra porque si dejamos que la capturen, si la transforman nos quitan nuestras raíces y perdemos nuestros derechos”.
Luis D´Elía, arremetió al opinar que “el grupo Clarín está jugando el papel que jugó el ejército de 1930 a 1982, pretenden ser los tutores de la democracia”.
Lorena Pokoit opinó que “ el grupo clarín es más que el grupo Clarín, en este contexto histórico representa una mirada de un sector muy conservador, actualmente excede la cantidad de licencias, según la nueva ley puede tener el 10 por ciento de todo lo que tiene actualmente”.
“La información es un derecho y no una mercancía como lo entiende el grupo económico. hay un gran engaño con la construcción de un falso discurso que quiere hacer creer que desaparecerá TN, Canal 13 Clarin y no es así”, sentenció.
Finalmente Yasky añadió que “los grupos (hegemónicos de la información) manejaban a los gobiernos, a los presidentes hoy la desesperación que tienen esos grupos de poder es que ya no están en condiciones de manejar, el único poder que se les escurre de las manos es el que ellos anhelan poder reconquistar”.
“Todas las energías están puestas en disolver los monopolios dueños de la palabra, porque son los que construyen el sentido común, porque ellos definen la agenda y lo que tiene que pensar los ciudadanos en cada momento de la vida. pero a pesar de ser tan poderosos tienen una debilidad y es que carecen de un proyecto superador, qué es lo que proponen ellos mejor”, concluyó.
Todos los panelistas coincidieron al opinar que la aplicación de la nueva ley garantiza la generación de más trabajo, porque se apoya la iniciativa de que un porcentaje de la producción deba ser local.
A lo que Ramírez agregó “lo que con esta nueva ley lo que no puede pasar es que se repitan en red reproducciones de la capital en el interior del país, eso obliga a la producción local, y se generará más empleo. Ese es un lugar al que debemos llegar, generando muchísimo incentivo desde las universidades y el Estado local”.
Números
Existen cinco mil licencias de servicio audiovisual en todo el país. 4500 se distribuyen en 2500 titulares, licenciatarios que tienen muchos menos medios de los que pueden tener según la nueva ley. Mientras que 250 licencias están en manos de 25 grupos de empresarios que ya están en el proceso de adecuación de la ley. Y 250 en un grupo, Clarín.
Los prestadores de radiodifusión pueden ser de tres tipos
De gestión privada con fines de lucro para cada lugar del País no deben ocupar más del 33 por ciento de las señales emitidas. De gestión estatal, para cada lugar del País no deben ocupar más del 33 por ciento de las señales emitidas. De gestión privada sin fines de lucro (ONG), para cada lugar del País no deben ocupar más del 33 por ciento de las señales emitidas.