La empresa de colectivos, cambió en su terminal el sector de salida de coches. El portón no cuenta con espejos en sus laterales y la chicharra no suele escucharse por el propio tránsito que hay sobre la ruta 21. Un riesgo para los peatones.
La empresa de colectivos, cambió en su terminal el sector de salida de coches. El portón no cuenta con espejos en sus laterales y la chicharra no suele escucharse por el propio tránsito que hay sobre la ruta 21. Un riesgo para los peatones.