El particular carnicero matancero se subió a las tablas e hizo uno de sus característicos shows mediáticos, esta vez en la pista del “Bailando por un Sueño”. Samid tuvo tiempo de vestirse de manera muy ridícula, pelearse con el turco de la novela, llevar a su sobrino a tocar el acordeón, cantar la marcha peronista, entregarle a Tinelli una placa con una mujer que no hizo más que agradecerle a Samid por toooodo lo que ayuda al Hospital Posadas… y como si fuera poco se llevó a un “apuntador” que, con carteles, le iba siguiendo el paso del discurso del político matancero. Como si todo esto fuera poco, Samid bailó, no le gustó lo que le dijo Nacha Guevara y presentó la renuncia. #¡¡¡Que viva el show!!!