Fernando Espinoza fue blanco de fuertes críticas luego de describir lo que está sucediendo en la provincia de Buenos Aires.De qué habla el exintendente y un paralelismo con los dichos que alguna vez vertió Alberto Balestrini.
Por Claudio Kappeler
ckappeler@periodicosic.com.ar
“Estamos arriba de un polvorín”, palabras más palabras menos esto fue lo que se escuchó en La Matanza allá por el año 2001. Nadie dijo entonces que Alberto Balestrini era un golpista ni que intentaba levantar al pueblo en contra de ningún Gobierno.
El intendente del Distrito más grande y complicado de la provincia estaba describiendo lo que sucedía barrios adentro. Semanas después comenzaron los primeros piquetes en la Ruta Nacional 3, las enormes ollas populares, los trueques y el estruendo sonó fuerte cuando cientos de comercios quedaron arrasados por los saqueos.
Lo que hizo Fernando Espinoza días atrás fue parecido. En medio de la ola de despidos, aumento indiscriminado de tarifas y una inflación que trepa a niveles imparables, el exintendente de La Matanza tiró una frase que desató una polémica: “Si explota el Conurbano, salta Macri y a la gobernadora le va a costar”, arriesgó el jefe del PJ bonaerense.
El problema no es lo que se dijo, sino quién lo dijo. Vivir en La Matanza, haber gobernado La Matanza, comandar el PJ y encima ser morocho, son razones suficientes para un apedreamiento en cadena desde las más altas esferas del Gobierno con la fuerte apoyatura de todos los medios de comunicación que hacen el cerco de protección para el macrismo.
Sin embargo, el hasta hace meses intendente local no se amilanó y redobló la apuesta: “Lo que dije suena fuerte, pero más fuerte es la realidad de lo que pasa en el Conurbano”, afirmó.
Ante la avalancha de críticas de los medios oficialistas remarcando un supuesto discurso golpista, Fernando Espinoza aclaró: “No queremos que explote el Conurbano y no queremos llegar a diciembre de 2001, pero es mi deber, como dirigente político con responsabilidades, advertir lo que va a pasar si no se corrige el modelo económico, esta película ya la vimos”, advirtió.
En un comunicado, el jefe del peronismo provincial haló de lo que “están viviendo los habitantes del Conurbano”, definiendo la situación como “preocupante”, al detallar los “tarifazos, despidos, inflación, recesión, incertidumbre y obras públicas paradas; esa es la realidad con la que conviven los bonaerenses”, remarcó.
“En muchos lugares del Conurbano hay gente que ya está pidiendo comida, cosa que no se veía desde el 2005”, completó Espinoza.
Mirada femenina
En la misma línea que Espinoza fue la actual intendente matancera Verónica Magario.
“Estamos viviendo una situación social compleja en La Matanza, no hay obras o están paradas y tendremos hacia fin de año una pérdida del 33 por ciento de los puestos de trabajo”, vaticinó.
“En los barrios más humildes las familias de menores ingresos empiezan a pedir leche”, subrayó la Intendenta y pronosticó que “esto se irá agravando”.
Magario se refirió también a los fondos de Anses que desde la Provincia se habría negado a distribuir María Eugenia Vidal. “Si la gobernadora no dimensiona la situación social se va a complicar mucho en las grandes ciudades del Conurbano como La Matanza o Lomas de Zamora”, advirtió.
La respuesta de Vidal
«No lo tomé como una amenaza. Si quiso serlo, no tuvo efectividad. Estoy convencida del camino que tomamos que apuesta a la dignidad de la gente», contestó la gobernadora.
En tanto que argumentó que no le preocupan los dichos del exintendente de La Matanza porque «cada bonaerense tiene opinión propia sin que nadie lo tenga que arriar a ningún lado» y sostuvo: «Quedó demostrado cuando Cambiemos ganó en los lugares más pobres de la provincia. La Argentina donde los dirigentes le dicen a la gente lo que tiene que hacer se terminó».
Días después, María Eugenia Vidal reconoció que Fernando Espinoza se comunicó con ella para hablar del tema y se refirió a una supuesta “disculpa” por parte del exintendente. De esta manera, la gobernadora dio por finalizado el debate.
Siga el baile
Sin embargo, el jefe del PJ bonaerense redobló la apuesta y horas después continúo con un raid mediático que lo posicionó como uno de los mayores críticos de la gestión macrista por estas horas. “Lo importante es que haga realidad lo que dice por los medios”, le dijo Espinoza a Vidal al tiempo que sostuvo: “Este plan económico que lleva adelante Macri está generando una desazón y una desesperanza que día a día se acrecienta”.
“La gobernadora tiene una provincia parada tiró, con una gestión realmente lenta que me hace acordar a una tortuga”
En esa línea, el exintendente advirtió que sus declaraciones apuntaron a “poner un alerta” porque “si no se retrotraen estas medidas económicas al país le va a ir muy mal y no queremos volver a diciembre de 2001”, dijo.