Lo hizo Verónica Magario en una carta a la gobernadora María Eugenia Vidal. La Comuna reclamó instrumentar los mecanismos para la puesta en marcha del CARE. “Los vecinos de González Catán corren peligro debido a los incendios y la contaminación”, dijo la intendenta en la misiva asegurando que la respuesta debe ser “urgente”.
La intendenta de La Matanza Verónica Magario le reclamó oficialmente al gobierno de María Eugenia Vidal que motorice la puesta en marcha del Centro Ambiental de Reconversión Energética (CARE), afirmando que su funcionamiento sería “la solución” para los problemas que genera la CEAMSE en la ciudad de González Catán. “La puesta en marcha del CARE permitiría realizar el cierre total del basural administrado por la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE) en González Catán”, afirmó Magario al asegurar que es “una solución definitiva a la problemática de la basura en nuestro distrito y en varios más del Conurbano”.
Desde la intendencia recordaron que el CARE generaría energía eléctrica mediante procesos que “están a la vanguardia tecnológica y que ya fueron comprobados en los países desarrollados que más se preocupan por resolver el tratamiento de residuos y producir energía limpia y ecológica”.
“Ya es urgente dar una respuesta sobre el CARE porque los vecinos de González Catán corren peligro debido a los incendios y la contaminación”, dijo Verónica Magario, lo cual le valió que los trabajadores de la CEAMSE tomaran medidas de fuerza dejando sin recolección de residuos a todo el distrito durante varios días. “Como es de su conocimiento, este municipio, desde hace años requiere la normalización del predio con el objetivo final de su cierre definitivo.
Conocedores de lo difícil de la situación, venimos impulsando desde La Matanza la ejecución del Proyecto CARE para la reconversión de los residuos en energía. Dicho proyecto tiene principio de ejecución y por decisión de la gestión del Presidente de la Nación el mismo se encuentra paralizado”. De esa manera, Magario le explicó a María Eugenia Vidal la actual situación que vive el Distrito.Y en ese marcó se recordó que la CEAMSE se encuentra operando de manera “deficiente y peligrosa”, lo que generó varios focos de incendio en el lugar. “Tal situación puso en estado de alerta tanto al municipio como a los vecinos del predio, ante la incertidumbre de las características de las emisiones producidas”, advirtió la intendenta.
“En función de ello es que le solicito su urgente intervención para que se investigue lo ocurrido en el predio a fines de enero y principio de febrero del corriente y se informe al municipio y a la comunidad el resultado de la investigación”, pidió Verónica Magario afirmando que esto “es imprescindible para devolverle a la comunidad la tranquilidad necesaria respecto de las características de las emanaciones producto de los incendios”.
Cómo está el CARE
Desde el Municipio explicaron que actualmente el proyecto del CARE se encuentra detenido en la finalización de su primera etapa, que es la construcción de la planta de separación de residuos, la cual, dijeron, “está muy avanzada”. La segunda etapa, que corresponde a la planta de generación de generación de energía, está en proceso de definición con ENARSA. Cabe destacar que, para lograr finalizar ambas etapas, los Gobiernos nacional y provincial deben destrabar los procesos administrativos correspondientes. La planta se encuentra en Ruta 1001, esquina Conde, en González Catán; y ocupa un predio de 25 hectáreas que fue cedido por el Municipio. La intendencia considera al CARE como su “proyecto estratégico”, que tiene como objetivo “dar una solución gradual, duradera y ambientalmente sustentable” al problema de la basura en La Matanza.
“En la planta del CARE se recibirán gradualmente los Residuos Sólidos Urbanos (RSU) generados en el Municipio a fin de darles el tratamiento más eficiente y sostenible. Mediante la separación mecánica y manual los residuos serán clasificados y separados en materiales reciclables y orgánicos. Aquellos que sean reciclables serán clasificados y preparados para ser reutilizados en el circuito productivo, conformándose así nuevamente en materias primas de nuestra industria (plásticos, vidrios, papeles y cartones, metales y muchos otros). Por último, a través de tecnologías de biodigestión anaeróbica se podrá generar energía eléctrica utilizando el material no reciclable”. El proyecto contempla la construcción de una planta industrial que permitirá dar proceso en forma gradual a las 1.500 toneladas diarias de RSU que se generan en el distrito y lograr así “el cierre progresivo” de la CEAMSE de González Catán.
Desde la CEAMSE aseguraron que “en González Catán no hay contaminación”
La recolección de residuos estuvo paralizada en el Distrito debido a un paro iniciado por los trabajadores del relleno sanitario. En ese contexto, la Coordinación Ecológica del Área Metropolitana Sociedad del Estado, emitió un comunicado en el que contradice no solo a los vecinos que denuncian los efectos nocivos en la salud de la población, sino a la Justicia que ya en 2005, determinó que el agua de la zona no es apta “ni para cepillarse los dientes”.
Para la empresa es fundamental no perjudicar a los vecinos y cumplir los dictámenes de expertos y la justicia que el propio municipio aceptó y que indican que en González Catán no hay contaminación”, lanzaron a través de un comunicado las autoridades de la CEAMSE en medio de un conflicto gremial. Las afirmaciones provocaron la indignación de los vecinos que hace años luchan por el cierre del rellano sanitario por las graves consecuencias que este ha provocado en el medio ambiente y en la salud de los habitantes de la zona. El deterioro en la calidad de vida en la población cercana al predio no puede negarse. Lupus, púrpura, distintos tipos de cáncer, afecciones en las vías respiratorias y en la piel, son solo algunas de los padecimientos que se vienen detectando hace años.
Según el último relevamiento realizado en 2014 por los Vecinos Autoconvocados contra la Ceamse de González Catán en los barrio San Enrique y Nicole, los más cercanos al predio, en cada familia hay al menos una persona con problemas respiratorios y en la piel. Mientras que por manzana, registraron al menos cuatro casos de cáncer. Como respuesta a la afirmación realizada por la empresa, Hugo Osores, miembro de la ONG que pide por el cierre del predio, adelanto que presentarán un documento “acompañado por pruebas” que demuestran que “el agua de González Catán está contaminada”. Pero no solo los vecinos sostienen que la CEAMSE contamina. En 2004 la Secretaria de Política Ambiental (hoy Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable), tras la realización de estudios en el agua, se determino que la misma no era apta para el consumo humano. En 2005, fue el juez Juan Pablo Salas del Juzgado Federal Nº 3 de Morón, quien tras las pericias realizadas por la Gendarmería Nacional, afirmó: “el agua no sirve ni para cepillarse los dientes”.
El reclamo por el cierre de la planta de la CEAMSE de González Catán se reactivo luego de dos incendios que se produjeron los días 19 y 28 de enero, que provocaron enormes columnas de humo, que podían observarse desde distritos aledaños. Luego, el relleno sanitario fue noticia por un paro que iniciaron sus propios trabajadores. “Las declaraciones pidiendo el cierre del relleno sanitario hechas por la intendenta de La Matanza llevaron al paro a los trabajadores que sintieron amenazada su fuente de trabajo”, esgrimió la empresa en el mismo escrito sobre el conflicto gremial