Con Fernando Espinoza y Verónica Magario abocados a la tarea de conquistar la provincia de Buenos Aires, las especulaciones que se realizan con respecto a quién será el candidato o la candidata en La Matanza son infinitas. Los primeros en aparecer fueron, hace varios meses, el senador bonaerense Daniel Barrera y la diputada provincial María Laura Ramírez.
Ambos tienen aliados y enemigos internos, aunque en los últimos tiempos la que más resistencia parece encontrar es la exsecretaria de Desarrollo Social. María Laura Ramírez inició una guerra inútil con sectores del Ejecutivo local, lo cual se suma a la resistencia que ya tenía de antemano por parte de los sectores más antiguos del peronismo matancero. La última ene aparecer como potencial candidata fue Graciela Suárez, dirigente muy cercana al fallecido Alberto Balestrini, del riñón de la agrupación Ramón Carrillo, hoy bajo el paraguas de Fernando Espinoza. El actual contexto nacional hace imposible evaluar hoy lo que podría pasar con las candidaturas locales, aunque no habría que descartar que estos sean sólo un par de globos de ensayo, y el verdadero candidato a gobernar La Matanza vuelva a Ser Fernando Espinoza, derribando así cualquier interna que pueda generarse.