Los estudios histopatológicos dieron negativo para COVID-19. Ahora, la investigación apunta a establecer la causa del fallecimiento ocurrido dentro de una celda de la seccional.
Emiliano Alarcón, un joven de 22 años falleció el 5 de abril en la Comisaría 1ra de San Justo y por los síntomas que había presentado durante las últimas dos semanas, su caso había sido catalogado como sospechoso. Tras su muerte, se le realizo un hisopado, cuya muestra fue analizado en los laboratorios de la Universidad de Buenos Aires.
Los análisis arrojaron resultados negativos para COVID-19 y los investigadores ahora intentarán establecer qué causo la muerte de Alarcón, quien se encontraba detenido desde octubre de 2019.
Inmediatamente ocurrida la muerte del joven, la comisaria había sido clausurada y los reclusos allí alojados, unos 57, fueron trasladados. Con la reapertura de la seccional, a los celdas de la Comisaria regresaron 47, la cantidad permitida de reclusos para esa dependencia policial.
Si bien la hipótesis de una muerte violenta fue, en principio, descartada, los investigadores entrevistaron a los compañeros de celda de Alarcón y realizaron pericias. Se espera que los próximos días, el cuerpo del Emiliano Alarcón sea exhumase para que se realice una autopsia y de esta manera esclarecer el caso.