La presidenta de la institución manifestó su preocupación debido a que comparten personal con el Centro de Día Fundación Colonia Esperanza, en el cual se confirmaron 9 casos de Coronavirus. “Tenemos que estar preparados”, dijo.
El Taller Protegido Apacid de Ramos Mejía lanzó una campaña solidaria con el objetivo de recaudar fondos que serán destinados a la compra de insumos de bioseguridad, esenciales para hacer frente a la pandemia de Coronavirus.
La preocupación radica en que el taller, ubicado en Cotagaita 2014, comparte personal con el Centro de Día Fundación Colonia Esperanza, entidad en la que se confirmaron 9 casos de COVID-19 en los últimos días. “Tenemos que estar atentos a que no pase nada”, dijeron desde la institución.
Hasta el momento, la entidad no recibió la visita de autoridades sanitarias. “Nos estamos manejando con los protocolos del Ministerio de Salud y las recomendaciones del médico del Hogar”, dijo la presidenta y representante legal de la institución, Valeria Súnico.
Ante las serias complicaciones económicas que atraviesa el taller, Súnico se instaló en lugar, que también funciona como hogar para personas con discapacidad. “No tenemos (recursos) para pagar a los auxiliares, se necesita uno por turno, y hay muchas situaciones de las cuales ocuparse”, explicó la mujer.
Además, la presidenta del taller agregó: “se nos está haciendo muy difícil conseguir y comprar los insumos que se necesitan ante posibles casos coronavirus”.
Debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio, los talleres protegidos llevar adelante sus actividades y no generan ingresos.
“Todo esto nos enfrenta a los gastos habituales y a gastos extras que se nos hace casi imposible de solventar sin contar con la ayuda del Estado, que aun no recibimos”, señalaron desde Apacid.
Este tipo de institución, recibe una beca de 1500 pesos por cada operario que allí se desempeña por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, pero no perciben este dinero desde marzo.
La institución solicita la donación de insumos o de efectivo a través de depósitos bancarios. Lo recaudado se utilizará comprar camisolines hidrorepelentes, barbijos N95, barbijos comunes, cofias, guantes, mascaras extras, lavandina, alcohol, termómetros y medicación. Además de pagar los sueldos al personal y abonar servicios.
Si bien la parte alimenticia está cubierta por el Municipio de La Matanza, en el hogar faltan los elementos de protección y productos