El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, encabezó el acto de lanzamiento de la Filial de la Unión de Clubes Barriales del Municipio, junto la intendenta de Lomas de Zamora y presidenta de la Unión Nacional de Clubes (UNC), Marina Lesci, el secretario general del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, y presidentes de las distintas filiales de clubes. Este Programa tiene como objetivo potenciar a los clubes e instituciones de barrio del distrito.
Con la creación de la Filial Matanza de la Unión Nacional de Clubes de Barrio, 139 instituciones del partido accederán a diversos beneficios para fortalecer y potenciar el rol de los clubes en la vida de niñas, niños y jóvenes matanceros. En este sentido, el jefe comunal expresó: “Es un día de mucha felicidad y emotividad, porque estamos fundando la Unión de Clubes de La Matanza, y eso significa una nueva etapa para el deporte social de nuestro distrito con más inclusión y más sueños cumplidos”.
El evento tuvo lugar en el Polideportivo Alberto Balestrini, ubicado en Lomas del Mirador, y durante el encuentro se hizo entrega simbólica de kits de pintura a representantes de los clubes presentes, dando inicio a una serie de acciones que se realizarán de manera articulada entre el municipio y la UNC. Entre estas acciones se destaca: la entrega de kits de material deportivo, el trabajo colaborativo con profesionales que brindan actividades deportivas, acciones conjuntas a través del programa “Potenciar Trabajo” que permita cumplir diversos roles necesarios en cada institución, recursos vinculados con las obras y mejoras edilicias, y generar recursos para hacer efectivas las acciones que surjan a nivel municipal, provincial y nacional vinculando los tres ámbitos, entre otras.
En este punto, Espinoza afirmó “Los clubes son el corazón de nuestros barrios. La infancia, la juventud y la familia entera se benefician con ellos”, y sostuvo que “el objetivo es fortalecer los clubes barriales del municipio que fueron víctimas de los tarifazos e incrementos por parte de la gestión anterior, y que en muchos casos se convirtieron en espacios de contención y ayuda para los vecinos y las vecinas que intentaban afrontar el difícil contexto social; incluso algunos clubes funcionaron como comedores comunitarios o espacios de ayuda social y acompañamiento a las familias”.