“El Concejo Deliberante está trabajando como a mí me gusta”

El concejal del Pro-Peronismo dio por finalizada la pelea que a principios de 2012 lo encontró enfrentado a la presidenta del Concejo Deliberante. “Me siento muy cómodo trabajando con Verónica Magario”, dijo. Además, habló de su distanciamiento con Juan Carlos Piriz y descartó abandonar el PRO. Reconoció que le gustaría ser diputado.

El 2012 empezó convulsionado para el concejal Fernando Asencio. Primero creó su propio monobloque desde el Pro-Peronismo y luego se metió en un fuego cruzado con la por entonces flamante presidenta del Concejo Deliberante Verónica Magario. A todo esto ya había hecho pública su pelea con su exconductor político, el diputado bonaerense Juan Carlos Piriz.

La relación entre Asencio y su par Adrián Verdini (bloque Unión Peronismo Federal) se resquebrajó en 2011 cuando Francisco De Narváez optó por el primero como candidato a intendente de La Matanza. Terminada aquella elección y sin puntos en común, ambos concejales decidieron dividir el bloque, dando nacimiento al Pro-Peronismo dentro del recinto.
A todo esto, Asencio había roto su eterna relación con el diputado provincial Juan Carlos Piriz. Aunque parecía una pelea más de las que siempre los tuvo como protagonistas, el propio edil salió a aclarar que se trataba del fin de una relación que no solo se centraba en la tarea política sino que incluía una vieja amistad.
“Políticamente ya no tenemos nada que ver con Juan Carlos, si bien él también está en el Pro-Peronismo, no compartimos ninguna actividad”, aclara Fernando Asencio a la vez que insiste: “Desde que se cortó la relación política tampoco hubo más relación personal; hay que dejar pasar el tiempo y por ahí algún día nos podemos sentar al menos a tomar un café”.
Para Adrián Verdini no hay quejas por parte de Asencio. “Yo me llevo muy bien con Adrián, casi lo considero un amigo”, dice, y afirma que el estar presidiendo un bloque le dio “mucho espacio” porque, asegura, “ahora puedo decir lo que siento”.

¿Qué diferencias encontró trabajando solo a cómo lo hacía antes bajo la conducción de Piriz?

“Son dos maneras distintas de trabajar. Acá me apoyan mucho con esta manera que tengo yo de salir a trabajar a la calle, en el contacto directo con los vecinos. Antes nos metíamos en una unidad básica y nos peleábamos entre nosotros”.

¿Es verdad que en algún momento pensó en alejarse del PRO?

No, en absoluto, llegó a decirse que me iba con Felipe Solá pero eso es mentira. Estoy muy de estar en el Pro-Peronismo, soy muy valorado dentro del espacio. Me llevo muy bien con Miguel Racanelli, Néstor Grindetti, Jorge Macri, Nancy Monzón y Gustavo Ferri.

¿Siente que encontró su lugar ahora, porque el comienzo de 2012 fue complicado para usted?

Arranqué mal en el Concejo (Deliberante) porque convenimos con Verónica (Magario) llevarnos de una manera que al principio no se pudo dar. Me sacaron la vicepresidencia por ser del Pro-Peronismo. Después se encauso la situación, se abrió el diálogo. Verónica venía con otra mentalidad desde el Ejecutivo y le costó relacionarse con todos los concejales no solo conmigo, pero hemos limado las asperezas y hoy puedo decir que me siento muy cómodo trabajando con Verónica Magario.

¿Si tuviese que hacer un balance del trabajo desarrollado por el Concejo Deliberante qué diría?

El Concejo Deliberante está trabajando como a mí me gusta, en armonía.

¿Es verdad que para usted se agotó la tarea como concejal?

La labor de concejal me gustó, aprendí muchísimo, llevo la tarea con mucha pasión, le pongo mucha dedicación; pero siento que no tengo más herramientas para ayudar a la gente y si no estás en un bloque mayoritario, las soluciones no aparecen.

¿Y dónde se ve una vez finalizado su mandato en 2013?

Yo estaré donde el Pro me necesite, decididamente en este proyecto, pero donde crean que debo estar. Si fuese mi deseo diría que me gustaría ser diputado de la provincia de Buenos Aires, pero si consideran que tengo que seguir como concejal, seguiré como concejal.

Deja una respuesta