Por Adolfo «Fito» Correa*
Son, tal vez, pocos conocidos los innumerables lazos de nuestro distrito con los comienzos mismos de la actividad aérea de nuestro país.
La inmediatez de la instalación del AeroClub Argentino, cuna de nuestra aviación, en tierras de lo que hoy es Villa Lugano y su posterior traslado a nuestro distrito, luego de un pasaje fugaz por Morón, vinculó para siempre nuestras alas y el Distrito matancero. Es, precisamente, en una visita aérea a la Chacra de los Tapiales, que un retorno tardío al AeroClub posibilitó la realización del primer vuelo nocturno mundial con improvisados tachos encendidos en los extremos de la pista, según investigación de Martín Biaggini
, historiador matancero que rescató este evento para la historia de nuestra aviación y para nuestro orgullo.
Hoy nos proponemos recordar al mayor Pedro Leandro Zanni, a los 72 años de su fallecimiento, un 29 de enero de 1942, a raíz de un accidente automovilístico. Tras toda una actividad pionera en nuestra aviación con vuelos en varios tramos de nuestro territorio que incluyeron el cruce de los Andes en un aeroplano propiedad de Jorge Newbery. En 1922 presenta a la Comisión del AeroClub Argentino un proyecto para el intento de realizar la vuelta al mundo en aeroplano.
El presidente de la institución, el Barón de Marchi propone e impulsa la creación de una Comisión Pro Vuelta al Mundo, que encabezará una colecta pública con el fin de recaudar los fondos necesarios para aquella aventura imaginada por Zanni.
Es allí, que junto a centenares de aportes para financiar este desafío, se suscita en el HCD de La Matanza la Ordenanza N° 157, que suma al pueblo matancero a la lista de contribuyentes para el emprendimiento de la adquisición del aeroplano que permita que este piloto argentino, hijo de inmigrantes italianos, lleve a cabo el sueño de dar una vuelta al mundo con aquellas endebles alas de entonces.
Aquella aventura iniciada en Ámsterdam en 1924, en un Fokker C IV, finalmente se frustró tras el recorrido de 29 mil kilómetros a su llegada a Tokio, desde donde no se pudo continuar por inclemencias climáticas. Sin embargo, el pionero Mayor Pedro Zanni puso en la historia de la aviación mundial, aquel intento de las alas argentinas y La Matanza estuvo allí presente como en tantas otras actividades de nuestros pioneros aeronáuticos y hoy estamos recordando los 90 años de aquella ordenanza de nuestro HCD, que nos ubica, como siempre, en la historia grande de nuestro país.
*CEHLaM
Fotos: Archivo CEHLaM.