“Tomaron nuestra causa para desviar la atención”, denunció públicamente Susana Aranda, vecina del barrio Las Mercedes que encabeza el pedido de cierre de la multinacional denunciada por contaminación ambiental.
Vecinos Autoconvocados contra Sika Klaukol emitieron un comunicado para deslindarse de los disturbios ocurridos en el Palacio Municipal durante una manifestación que tenía como fin exigir a las autoridades locales el cierre definitivo de la fábrica ubicada en el barrio Las Mercedes de Virrey del Pino.
“Ningún vecino participo en el acto de violencia, ni tampoco teníamos conocimiento de que esto podía suceder”, aclararon inmediatamente desde la organización vecinal que desde hace 11 años denuncia a la multinacional por contaminación ambiental.
“Nuestra lucha es pacífica y nuestro reclamo justo”, remarcaron los Autoconvocados del barrio Las Mercedes. “Ya está probado que la violencia es por parte de la empresa que nos contamina y el poder político y judicial que los encubre”, lanzaron.
Susana Aranda, principal referente del reclamo vecinal, denunció públicamente que “hubo infiltrados” durante la protesta y que no tienen conocimiento de “a quien responden” las personas que actuaron de manera agresiva. “Tomaron nuestra causa para desviar la atención”, aseguró la mujer.
“Nuestro escrache era solo pegatinas y pintadas con nuestra verdad y reclamo, por ende repudiamos los hechos de violencia en el municipio y seguiremos reclamando nuestra causa porque es legítima”, remarcaron desde la organización vecinal.
Los habitantes del barrio Las Mercedes responsabilizan a la constante emanación de material particulado provenientes de las tolvas de la planta, por las múltiples enfermedades sufridas por los vecinos. Leucemia fulminante, insuficiencia respiratoria, cáncer pulmonar, renal y de piel, entre otras, son las afecciones que abundan en la zona.
Son más de 100 los casos de muertes directamente relacionadas con la contaminación las que se registran en el barrio, compuesto por sólo nueve manzanas.
En la Justicia, la causa lleva 11 años dando vueltas. Originalmente, la denuncia fue radicada en el Juzgado Federal de Morón, en ese entonces a cargo de Jorge Rodríguez.
Por el Juzgado pasaron luego Juan Pablo Salas y Ernesto Barral, quien luego de una década declaró la incompetencia del órgano judicial y derivó la causa al Juzgado de Garantías N°4 de La Matanza, de orbita provincial.
Pero este también rechazó brindar una resolución. El expediente pasó entonces a la Corte Suprema de Justicia, que determinó que la causa regrese al Juzgado N° 4, mientras que la UFI N° 6 es la encargada de llevar adelante las investigaciones correspondientes.
Cabe destacar que según la normativa de la Secretaria de Política Ambiental de la provincia de Buenos Aires, Sika Klaukol se encuentra entre los establecimientos que se consideran peligrosos para la seguridad, salubridad e higiene de la población. Por este motivo, debería instalarse en zonas rurales, con estrictas medidas de seguridad.
Sin embargo, tras 11 años de lucha los vecinos del barrio Las Mercedes no han obtenido una respuesta favorable y la multinacional continua con su actividad las 24 horas.