Hace siete años, un terreno ubicado en las cercanías del centro comercial de la localidad de Lomas del Mirador se transformó en un escenario por el que los vecinos de la zona temen pasar. La ausencia de iluminación, la acumulación de residuos domésticos, comerciales, y hasta de anima les muertos, conducen a la aparición de roedores que conviven con los habitantes. En ese espacio existieron “dos ataques sexuales y un intento de asalto”.
Por Maricel Pisa
Se trata de un terreno que está deshabitado hace siete años, y desde ese momento empezó a reunirse basura de todo tipo: residuos domiciliarios, cajones de pollos, retazos de telas y cueros, y animales muertos. Lo que provoca olores desagradables, y dada la combinación de estos factores, el espacio se convierte en un lugar propicio para la aparición de roedores e insectos. Pero, en este último tiempo se conocieron algunos hechos que pusieron en alerta a los vecinos, “casos de ataques sexuales en dos oportunidades y un intento de asalto, no por la basura”, según indicó Ruth Ponce de León, una de las vecinas de la zona.
En pleno centro
El espacio se encuentra ubicado en la esquina de Huergo y Colón, a pocas cuadras del centro de la localidad, en un radio de cinco cuadras, hay colegios y jardines, y “cuando hay mamás que tenían que acercarse con carritos de bebé, tenían que bajar a la calle, porque por la vereda no se podía transitar”, señaló Ruth. Y aclaró que eso “representa otro riesgo, ya que se trata de un camino en el que circulan muchos vehículos ya que conecta con la Av. General Paz”, y como consecuencia, deben optar por realizar un recorrido más extenso. “El cordón ya no sabemos dónde está”, apuntó la vecina.
Desde el vecindario piden ayuda: “Nos tienen que ayudar, tienen que hacer algo, apuntamos por lo menos a que esté limpio y que no haya más casos (de ataques sexuales o delictivo)”.
El problema reside en que “la gente tira basura continuamente, hasta dejaron un micro abandonado hace un año y medio (cuando sucedió uno de los ataques), hay ratas, cucarachas, no se puede más, salen por las rejillas”, añadió la vecina. Y la situación se agravó con el último temporal, cuando cayó gran parte de las paredes de la construcción que existía en el terreno.
Al tiempo que sostuvo que “hace poco hubo un caso de sarna de una nena, y hace casi 35 años no había un caso tan notorio”.
“El peligro es continuo”
“No se puede pasar más por ahí, habían dejado un sillón, la gente no pasa, no hay luz en esa esquina y alrededor siempre tenemos un problema, hay un olor insoportable, o las ratas, o las cucarachas, además de que el problema es que alguien se pueda meter, esconder, y hace una semana intentaron robarle a una mujer que venía de hacer las compras en esa esquina, el peligro es continuo”, contó la vecina.
Convocatoria
Al cierre de esta edición los vecinos convocaron una reunión para juntar firmas y presentar el petitorio a las autoridades municipales en busca de una solución definitiva que los libere de esa situación cotidiana con la que deben enfrentarse.