Así lo aseguró Julio Alak en el Congreso Nacional sobre Democratización de la Justicia. El funcionario además manifestó que “la democratización es un desafío permanente y constante, y nunca fue fácil en la historia argentina”.
El ministro de Justicia, Julio Alak inauguró el Congreso Nacional sobre Democratización de la Justicia en la Universidad Nacional de La Matanza y se refirió a las fuertes críticas del sector opositor a la Reforma Judicial.
En ese sentido, Alak manifestó que “la democratización es un desafío permanente y constante y nunca fue fácil en la historia argentina” y aseguró que “el poder económico siempre estuvo en contra del poder popular”.
Además, el funcionario manifestó que “el poder económico, cuando no pudo parar el aluvión del pueblo, destruyó la democracia, y ahora que no pueden utilizar las Fuerzas Armadas utilizan los medios concentrados de comunicación que son los que descalifican la democratización de la justicia”.
Para ejemplificar, Alak enumeró las resistencias que generaron en un primer momento la instauración del voto popular y secreto. “Cuando los mismos gobernantes decían que solamente la gente ‘decente’ podía votar”, recordó el ministro.
En la misma línea, Alak señaló: “hoy en la Argentina sigue vigente ese pensamiento: que el pueblo no puede elegir a los miembros del Consejo de la
Magistratura”.
Durante su discurso, Alak remarcó: “necesitamos crear mecanismos para que la democracia penetre en el Poder Judicial” y resaltó que este “no es de los abogados ni de los jueces, sino del pueblo y tenemos derecho a debatir su funcionamiento”.