A pesar de contar con una cuenta especial por tener un miembro de la familia electrodependiente, Perla Herrera realizó incontables reclamos sin tener respuesta alguna. Su hijo Enzo, de 5 años, padece una encefalopatía crónica no evolutiva. Sin luz eléctrica, los soportes mecánicos que lo asisten no funcionan y la batería del respirador dura solo dos horas.
“Llamé a Edenor muchísimas veces, estamos registrados como electro dependientes y, generalmente, antes por cortes de dos horas, mandaban la cuadrilla con un grupo electrógeno, pero esta vez nada. Les explique qué Enzo es inmunodeprimido, por lo que no puedo trasladarlo y la batería del respirador dura dos horas”, resumió Perla Herrera, mamá del nene de 5 y que el domingo 5 de febrero estuvo 12 horas sin luz.
El pequeño nació con 27 semanas de gestación y como consecuencia de algunas complicaciones, padece una encefalopatía crónica no evolutiva. Para garantizar su bien estar, la habitación de Enzo debe tener de manera permanente un aire acondicionado, ya que no regula temperatura.
Además utiliza varios soportes mecánicos; un respirador, una bomba de alimentación, un oxímetro, un concentrador de oxígeno, un saturómetro, un cardidesfifrilador y un aspirador de secreciones. Todos los aparatos funcionan con energía eléctrica. Al tener un miembro electrodependiente, la familia tiene una cuenta especial en la compañía Edenor que no debería interrumpirse, o restablecerse inmediatamente en caso de la interrupción del servicio.
El corte de luz se produjo el domingo a las 12.00 del mediodía. “Llame al Ministerio de Minería y Energía, al ENRE (Ente Regulardor la Energía) y nada. Una de las veces que llamé al Ministerio, la persona que me atendió me dijo que para ingresar el reclamo debían pasar más de tres horas, cuando la batería del respirador dura 2”, contó Herrera.
Desesperada, la mujer le respondió que en ese momento, estaba la ambulancia en su casa asistiendo a su hijo de manera manual. Habían pasado horas sin poder controlar el ritmo cardiaco y la saturación, porque sin energía eléctrica no funcionan los aparatos.
Incluso, son el soporte mecánico correspondiente, Enzo no puede ser alimentado. “Era una situación de riesgo de vida para mi hijo y me terminan diciendo que allí solo tomaban los reclamos.
Por su delicada condición y la cantidad de aparatos que necesita para vivir, trasladar a Enzo es muy difícil, por lo que Perla recurrió a las redes sociales, en busca de la solidaridad de la gente que sí contará con el servicio, para al menos poder cargar la batería del respirador de su hijo.
Con cada corte de luz, la historia es siempre la misma y la respuesta también: nula. La luz regreso a la medianoche. “La vida de mi hijo no les interesa”, lamentó la mujer. Por ley, la empresa proveedora del servicio eléctrico debería facilitar a las familias con este tipo de cuenta, un grupo electrógeno, la última vez que la empresa envío un grupo electrógeno ante un corte de luz, fue en 2015.
Los constantes reclamos no suelen llegar a ningún lado. “Tengo que juntar todos los números de reclamo y pedir al ENRE la intervención de la empresa. Esto por lo general tarda un año. Luego, Edenor hace su descargo, a ellos los multan, me lo comunican y se retira la demanda”, explicó Herrera.
La mujer remarcó que lo abusos de la empresa se dan ante todos los usuarios y que el tiempo que toma realizar los reclamos correspondientes, dejan a compañía manejarse de esta forma. “Edenor está obligado a realizar un descuento de la factura por falta de suministro superior a 6 horas y cada 6 horas va subiendo, pero lamentablemente nadie hace efectivos los reclamos”.