
El productor y director matancero Tony Panero (32), incursionó en el género pornográfico en el año 2005, pero aclara que dirige cortos, miniseries y participa en la producción de películas dentro de otros géneros. También asegura que es muy detallista en todo y se califica como “un enamorado absoluto de las mujeres”.
En una charla con S!C, revela que con su trabajo intenta “desnudar a la mujer por dentro” y que le gusta “jugar con la mente humana”.
Por Ángela Tobar
¿Qué analizás en el momento de dirigir una película del género pornográfico?
Soy un convencido de que la gente tiene sexo de acuerdo a cómo piensa, por mi trabajo en la creación de una película porno, la encaro desde el lado de la psicología.
Quiero generar una contradicción con el espectador, mostrar el proceso de elección de una persona para tener sexo. Por ejemplo, el tipo ante tres chicas;

Una rubia, una morocha y otra pelirroja se encuentra con que le encantó la rubia… pero por lo que dijo la morocha se acostaría con la morocha, por más que la rubia le atraiga físicamente.
Entonces, aparte de darle al tipo una escena con sexo, yo busco darle algo más. Soy partidario de que si bien esto es un negocio a la gente siempre hay que darle algo más, porque quiero hacer un trabajo que sea digno y que el espectador reciba algo bueno, por eso siempre está el plus, te voy a dar escenas de sexo, pero también voy a trabajar para contar otra cosa, dar algo que deje pensando, me gusta jugar con la mente humana.
¿Las películas están guionadas de acuerdo a este plus del que hablás?
En mis películas porno no trabajo con guión. Tengo una idea muy clara de lo que quiero, por ejemplo en Detrás del Porno, (película dirigida por Panero) trabajé con una psicóloga y armé pautas, básicamente lo que le pedí es que me diga quiénes son las mujeres que se presentan a los castings de la película, le dije a la psicóloga `desnudalas por dentro´ y la verdad es que las entrevistas de esta película quedaron bastante bien.
Entonces, se acerca una mujer que quiere hacer porno y ¿sale de ahí sabiendo quién es?
Es lo que se intenta, en las entrevistas indago por qué quieren hacer esto, si hace mucho que lo vienen pensando, qué cosas se preguntan ellas mismas, cuáles son sus conceptos. Sus miedos, sus objetivos, qué esperan de la vida.
Con esta entrevista tan existencial que realizás, ¿te pasó que alguna se arrepintió y se fue?
No, la verdad no me pasó… sabés que sería genial, me hubiese encantado que me pase eso. Si una chica se animaría a decirme “no mirá, me hiciste pensar tanto que no quiero hacer esto”, estaría buenísimo. Y ahí trabajaría con la desesperación de buscar una mina y filmar en horario. Sería genial descolocar. Esas cosas inesperadas suman mucho, están buenas.
¿Qué busca una actriz porno?
Hay gente que busca fama, otra es muy narcisista, necesita mostrarse todo el tiempo y disfrutan que las vean teniendo sexo, hay una cuota de necesidad de fama y narcisismo.
¿Los hombres también son analizados antes de las filmaciones?
No, porque yo ya sé cómo piensan los hombres. El hombre es muy básico quiere comer, garchar y dormir. La mayoría es así. Son mucho más interesantes las mujeres que los hombres. No me canso de descubrirlas, soy un enamorado absoluto de las mujeres, me encanta compartir tiempo con las mujeres, saber cómo piensan, qué quieren. Por eso, cuando se presentan para trabajar en una película me interesa saber qué las motiva.
¿La apertura sexual de la mujer en los últimos años se refleja en tus filmaciones?
Es muy loco lo que está pasando con las mujeres, antes tenían un rol mucho más sumiso, ahora las mujeres tomaron las riendas. Fui adolescente en los ´90, y en esos años acostarte con una chica era un quilombo. Nadie garchaba a temprana edad, pero ahora a los 15 años ya tienen sexo, hay una apertura que viene acompañada de las nuevas tecnologías y la excesiva exposición que hay en Internet. También, tienen que ver los medios y los programas de chimentos que a las dos de la tarde muestra a minas en pelotas y hablando groserías. La mujer por más puta que sea debe conservar misterio y sensualidad. Y eso lo trabajo en mis films, la mujer sigue teniendo misterio.
¿Cuál es el límite del género porno?
Cada productor y director se marca los límites, en mi caso cuando me metí tenía mucha curiosidad y con el tiempo la fui saciando, pero siempre me pongo un límite no por pudor, si no porque es saludable y me di cuenta que dentro de la escala de perversiones sexuales soy un tipo bastante normal.
¿No se te ocurrió trabajar con parejas homosexuales, travestis o filmar zoofilia?
No, la zoofilia me parece aberrante y es una actividad para denunciar, porque un animal no puede elegir, los seres humanos mayores de 18 años pueden elegir, los animales no. Las películas reflejan cómo somos los que las producimos y yo tengo mis límites. Trabajo para el placer, porque el que tiene sexo lo hace para dar y recibir placer y yo tengo como mérito que los actores de mis películas, disfrutan del sexo, trabajo con orgasmos reales.
¿Cuáles son los pros y los contras de dirigir este género la Argentina?
El pro es que se puede dirigir, producir y vender una película muy rápido, la contra es que en algunos sectores de la sociedad está mal visto el género y lo asocian con falta de capacidad, de talento, creen que si dirigís porno no debés ser muy bueno. Pero si hago lo que hago es porque me gusta, ahora estoy incursionando en otros géneros, pero lo que hago siempre es por elección.
El PORNO en números
Con menos de 10 mil pesos, se puede producir una película porno.
Alrededor de 2 mil pesos es lo que cobra una actriz por una jornada de trabajo.
Una película de este género puede producirse en 1 día.
Fantástico, siempre es bueno que surja gente nueva dispuesta a darle un tono especial al porno. Últimamente está degenerando demasiado y se convierte en basura comercial barata.
Hay que volver a crear el arte!