Por Adolfo “Fito” Correa
“Recibo complacido su atenta tarjeta y la composición musical, La Marcha de San Lorenzo, debida a su inspiración, que ha tenido la deferencia de dedicármela, y que la acepto muy agradecido por su atención. Con el objeto de confirmar el merecido juicio que merece su competencia la Marcha de San Lorenzo será entregada a las bandas de la guarnición y tendré mucho gusto en oírlas. Agradecido por sus benévolas palabras, le reitero mi afectuoso saludo”.
Pablo Riccheri, Ministro de Guerra. Enero de 1902.
Así contestaba el General Riccheri, oriundo de San Lorenzo, el envío de Cayetano Silva con la música de la célebre marcha y meses más tarde, el 30 de octubre de 1902, hace 110 años, se estrenaba, en la inauguración del monumento al Libertador, en la ciudad de Rosario, con la presencia del Presidente de la Nación, don Julio A. Roca.
Así nace nuestro segundo Himno Nacional, que seis años después, en 1908, encontraría su letra de la mano de don Carlos J. Benielli, docente del Colegio Mariano Acosta. De allí en más se convertiría en la marcha más ejecutada en el mundo y en las más diversas ceremonias, desde Europa hasta el lejano Oriente y pensar que esta obra musical, del maestro Silva, fue vendida en sus derechos de autor, en épocas de vacas flacas, a la firma Ediciones Breyer Hnos. por 50 pesos, de esos años.
Don Cayetano Alberto Silva, uruguayo de origen, argentino por adopción, nacido un 7 de agosto de 1873, falleció tempranamente en 1920, dirigió bandas del ejército en todo el país y entre ellas el Reg. 3 de Infantería, cuando aún estaba en Barracas, luego a fines de los años 40, llegaría a La Matanza.
Un afectuoso saludo del pueblo matancero, a la memoria de este hombre no tan conocido, ni homenajeado. Agrademos a su hijo y a su nieto que nos han dejado una recopilación editada en 1997, donde nos hacen conocer la rica vida y obra de don Cayetano Alberto Silva, autor de la Marcha de San Lorenzo”.