La mira está puesta en bares y restaurantes que extienden sus locales sobre las veredas, armando una estructura cerrada de vidrio o plástica. Las zonas que se controlarán serán Ramos Mejía y San Justo. Si no cumplen con los requisitos establecidos para utilizar las veredas, los comercios podrán ser clausurados.
La Comuna anunció que desde la semana próxima se realizarán controles en bares y restaurantes de Ramos Mejía y San Justo con el objetivo de sancionar a aquellos comercios que ocupen las veredas de manera indebida.
La medida fue tomada luego de las numerosas denuncias que fueron recibidas en la Secretaría de Control Comunal. Es que los peatones son las más afectados por la medida adoptada por los dueños de bares y restoranes, que para resguardar a los clientes que prefieren sentarse afuera, cierran con estructuras de plástico o vidrio las veredas.
Desde Control Comunal, aclararon que “cerrar” las veredas no está prohibido, pero debe hacerse cumpliendo ciertas normas. Dejar un metro y medio libre para el paso de los peatones, es uno de las reglas a cumplir por los comerciantes.
Además, previa instalación de la estructura de cerramiento, el proyecto debe ser aprobado por la Comuna. Tampoco se pueden obstruir ochavas de las esquinas ni las rampas destinadas a facilitar el traslado de personas con movilidad reducida.
En tanto aquellos que no respeten las normas establecidas, podrían ser sancionados con la clausura temporal del local, hasta que se ajuste a las normativas que regulan el cerramiento de las veredas por parte de bares y restoranes.