Hace seis meses que la primera casa ecológica de La Matanza está en construcción y actualmente se encuentra en la etapa final. En poco tiempo ya podrá ser habitada por la familia de Máximo Acosta, el niño que necesita un hogar que cumpla con las condiciones necesarias para proteger su salud. Según indicaron los arquitectos del proyecto, “se espera que a fines de noviembre Maxi esté festejando su cumpleaños número cinco en su nuevo hogar”.
Por Ángela Tobar
atobar@periodicosic.com.ar
La familia, que ocupará esa novedosa vivienda, está constituida por cinco integrantes: tres niños y dos adultos. Uno de esos niños se llama Máximo Acosta, nació hace cuatro años, con tan sólo 27 semanas de gestación y fue el único sobreviviente de un embarazo de trillizos. Su peso no llegó al kilo y luego de un mes de internación recibió el alta médica.
Los hermanos de Maxi tienen 2 y 8 años, todos viven en un terreno ubicado en Barrientos 5.980, en la localidad de González Catán, a la altura del Km. 31 de la Ruta 3. Hasta este momento viven dentro de una casilla de 25 metros cuadrados, realizada en madera y que no cumple con los requerimientos básicos para proteger la salud de Máximo, quien desde su nacimiento debió aprender a convivir con hipoacusia bilateral, retraso madurativo debido a su nacimiento prematuro, desnutrición grado tres, neurosensorial profunda, displasia broncopulmonar, anemia y bronquitis crónica.
Ante este panorama, desde Red Solidaria Caseros se inició la campaña “Un techo para Maxi”, con el fin de poder construir una vivienda acorde a las necesidades de la familia, y con el aliciente de que sería la primera casa realizada en el Distrito con productos reciclados. En el transcurso de la obra se sumaron vecinos, comerciantes y la delegación Sur de González Catán, quien “dio un envión muy importante a la obra”, mencionó Natalia Mutti, miembro de la Red Solidaria Caseros.
Además destacó que “el Municipio donó materiales chapas, hierros, arena, además de la mano de obra. Hemos avanzado muchísimo con esta ayuda, porque nosotros al ser voluntariado íbamos los fines de semana y con esto se avanzó muchísimo porque ellos trabajan de lunes a viernes”.
Luego de coordinar los trabajos y recibir diversas donaciones provenientes de cientos de vecinos y desde el mismo Municipio, los realizadores de este proyecto sienten que están cerca de cumplir el sueño de lograr que esta familia tenga un techo propio, en el que la humedad y el frío no se filtren dentro del hogar y ofrecer a los niños las condiciones elementales para crecer y proteger su salud.
“Está bastante avanzada la obra, las etapas que vienen ahora son colocar los caños para el gas, la electricidad y el agua. Además estamos haciendo las divisiones internas y una vez que se pasen los cables de electricidad se va a comenzar a revocar”, explicó Mutti.
En referencia al tiempo que llevará cumplir con esta etapa aclaró que “como trabajamos con todos materiales donados, es difícil calcular el tiempo que nos llevará. Avanzamos a medida que llegan los materiales, pero apostamos a la idea de que a fines del mes de noviembre, Máximo esté en su casa para festejar su cumpleaños”.
Qué necesitan
Según se informó, se necesita todo lo que requiere la instalación de la electricidad, como caños, tapitas de luz, enchufes, disyuntor, termotanque.
Además de los revestimientos necesarios para poder tapar las botellas.
Mientras que todos los materiales para la conexión de gas, ya fueron donados por distintas entidades. Al igual que el durlock para cubrir las paredes de la cocina.
Materiales eléctricos:
20 cajas rectangulares , 7 cajas octogonales chicas, 30 conectores de 7/8″, 14 conectores de 3/4″, etc
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Para colaborar llamar a ELECTROMUNDO (Pablo) 4769 – 2152 que se suma a la campaña dejando los materiales a precios bajos para que Maxi pueda tener su vivienda digna.
Cuestión de cuentas
El costo económico que lleva realizar una casa ecológica, en comparación a la cimentación tradicional con ladrillos, es de aproximadamente el 15 o 20 por ciento menos, sumado a la plusvalía del cuidado ecológico. Ya que la novedad de este emprendimiento es que la casa está construida con ecoladrillos realizados con botellas de plástico de litro y medio, rellenos de desechos de plásticos limpios, como sachet de leche, bolsas, sobres de jugos.
El espacio cuenta con 70 metros cuadrados, divididos en un baño, dos habitaciones, cocina, living y comedor y las paredes cuentan con 13 mil ecoladrillos, prolijamente colocados por los arquitectos del proyecto.