“Estamos decepcionados de la Justicia”

Así lo manifestó el hermano de Emiliano Pereyra Suarez, asesinado en 2019 en la puerta de su casa durante un robo en Villa Luzuriaga. El 26 de abril último, uno de los partícipes del hecho, tenía prisión domiciliaria y se fugó al momento en que iba a ser trasladado a un penal. La familia de la víctima denuncia que habían advertido que el delincuente no cumplía y se ausentaba de su domicilio. Incluso, estuvo involucrado en un robo. 

«Responsabilizamos al juez  de Menores Daniel Testti y al fiscal por lo que ocurrió y lo que pueda ocurrir, porque hay un asesino suelto y nada hace nada”, dijo Matias Pereyra Suarez, hermano de Emiliano, quien fue asesinado el 16 de agosto de 2019 en la puerta de su casa y frente a su padre por 3 delincuentes que lo abordaron para robarle la camioneta.  

Y es que la familia sufrió un nuevo golpe: el 26 de abril Héctor Oscar Barris, uno de los delincuentes partícipes necesarios del crimen y que contaba con el beneficio de la prisión domiciliaria, se fugó en momentos que iba a ser trasladado al Penal 53 de Florencio Varela.  

“Estamos llenos de bronca, porque esto lo veníamos advirtiendo, denunciando que no cumplía con la prisión domiciliaria”, manifestó matías, quien además remarcó que la revocación de la prisión domiciliaria de Barris no se determinó por las quejas de la familia, sino porque estuvo involucrado en otro hecho delictivo. 

“Esto es un ejemplo más de una Justicia viciada de corrupción.Estamos decepcionados de la Justicia, del poder político que niega la realidad. En La Matanza todos los días hay un Pela, pero no todos los casos llegan a difundirse mediáticamente”, lamentó el joven.  

Ahora, la familia de Emiliano pide que una vez capturado, a Barris se le incremente la pena “por todas las violaciones a la ley que cometió”.

Emiliano tenía 38 años, una hija de 19 y un nieto de 1 año y medio. Familiares y amigos, lo apodaban “el Pela”. El juicio por su asesinato se llevó a cabo en noviembre de 2020. Abraham Gonzalo Ruiz fue condenado a prisión perpetua “Queremos que pague todos los años que tenga que pagar, ni un día menos, porque el Pela no está más”, remarcó el hermano de la víctima. 

Luciano Ricardo Cepeda, quien al momento de hecho tenía 15 años, fue declarado inimputable.  “No se implementó ningún tipo programa de rehabilitación, ningún tipo de seguimiento, quedó como si no hubiera pasado nada”, advirtió Pereyra Suarez.   

Y el tercer involucrado es Héctor Oscar Barris, actualmente prófugo de la Justicia. 

“El Pela tenía el derecho más fundamental que tenemos todos y el Estado debiera garantizar, el derecho a la vida y no se lo cumplieron. La Justicia debería ser reparadora”, lamentó el joven. 

La familia atraviesa además, un duro momento porque están en riesgo de perder el servicio de abogados gratuitos que brinda el Municipio. 

“Sin el patrocinio nosotros no hubiésemos podido acceder a la justicia ni tener representación ni asistencia legal. Así como nosotros hay muchos familiares de víctimas que lo necesitan. Es nuestro derecho”.