Comienza un segundo juicio por el asesinato de Lucas Verón

En este caso serán juzgados 3 policías bonaerenses a quienes se les imputa los delitos de amenazas agravadas, falsificación y/o adulteración ideológica de documentos, emisión de falso testimonio y privación abusiva de la libertad, con el presunto fin de desviar la investigación por el crimen del joven de 18 años de González Catán que fue ultimado por un efectivo en 2020.

El 10 de abril iniciará en el Juzgado Correccional Nro. 4 de La Matanza, un segundo juicio por el crimen de Lucas Verón, perpetrado por el efectivo policial Ezequiel Benítez en 2020, en complicidad con su compañera de patrulla, Cintia Duarte. Ambos fueron encontrados culpables de asesinato en un juicio por jurados en agosto de 2022.

Ahora, son serán sometidos a juicio el Comisario Inspector Diego Adrián Ocampos, quien ejercía el cargo de Subjefe Departamental de la Policía de La Matanza, el Subcomisario Emilio Quinteros y la Oficial Subayudante María Gisel Genez, que prestaban servicio en la Comisaría 1ra de González Catán

Los efectivos están imputados por los delitos de amenazas agravadas, falsificación y/o adulteración ideológica de documentos, emisión de falso testimonio y privación abusiva de la libertad.

“Todos ellos deberán rendir cuentas por intentar desviar la investigación amenazando a testigos y manipulando actas con la connivencia del fiscal Juan Pablo Tahtagian. que actuó deliberadamente con el fin de encubrir a los asesinos de Lucas”, expresaron desde Hijos La Matanza.

Lucas Nahuel Verón fue asesinado la madrugada del sábado 10 de julio. El joven había ido en moto, junto a un amigo, a un kiosko que se encuentra a pocas cuadras de su casa. Cuando regresaban, en el cruce de las calles Llerena y Coronel Achega, fueron embestidos por un patrullero.

Una vez que se reincorporaron, asustados, salieron corriendo. En ese momento, Ezequiel Benítez, bajó del vehículo y comenzó a disparar. Una de las balas impactó en el pecho del joven de 18 años, que murió poco después de llegar al hospital. Una vez que la víctima quedó tendida en el suelo el menor de 17 años siguió corriendo para ir a pedir ayuda, mientras que ambos policías huyeron del lugar.

“Lucas, era el alma de la familia, le brillaban siempre los ojos de felicidad, amante del trabajo artesanal y los caballos, amor que le transmitieron Cristian su papá y Tati Mapelli, abuelo del corazón de Lucas ya que Martin Aguilar, su abuelo materno, fue secuestrado durante la última dictadura cívico militar y al día de hoy continúa desaparecido”, añadieron desde Hijos La Matanza.

Además, la entidad remarcó que “Lucas, lamentablemente es el primer joven asesinado en democracia por las fuerzas de seguridad siendo nieto de uno de los 30.000 desaparecidos” y destacaron “la capacidad de Graciela y Cristian (padres del joven asesinado) que junto a su familia han logrado transformar la bronca en motor de lucha”.