Alrededor de 300 mil matanceros viven con algún tipo de discapacidad y deben afrontar diariamente con las limitaciones que la sociedad les impone.
Fuentes consultadas remarcaron que “falta entender que el discapacitado tiene derecho a estar en igualdad de condiciones”. Desde la Subsecretaría
de Capacidades Diferentes local se instó a la creación de un lugar de tránsito que contenga temporalmente a ese sector poblacional.
Por Ángela Tobar
atobar@periodicosic.com.ar
Las personas que viven con capacidades diferentes deben afrontar diariamente las barreras urbanas, arquitectónicas del entorno cotidiano, además de atravesar los prejuicios culturales de una sociedad que en muchas ocasiones los limita en sus derechos.
Según describe la Organización Mundial de la Salud (OMS) “las personas con capacidades diferentes conforman uno de los grupos más marginados del mundo. Esas personas presentan peores resultados sanitarios, obtienen resultados académicos más bajos, participan menos en la economía y registran tasas de pobreza más altas que las personas sin discapacidades”.
Además agrega que “las personas con discapacidades no suelen recibir la atención de salud que necesitan, la mitad de ellas no pueden pagar la atención de salud, frente a un tercio de
las personas sin discapacidades. Las personas con discapacidades son más de dos veces más propensas a considerar insatisfactorios los servicios de salud que se les dispensan. Son cuatro veces más propensas a informar de que se las trata mal y casi tres veces más propensas a que se les niegue la atención de salud”.
A esto se le suma que viven “en condiciones peores por ejemplo, alimentación insuficiente, vivienda precaria, falta de acceso al agua potable y el saneamiento que las personas sin discapacidad. Debido a los costos suplementarios que generan, entre otras cosas, la atención médica, los dispositivos de ayuda o la asistencia personal, las personas con discapacidades suelen ser más pobres que las no discapacitadas con ingresos similares”.
En este punto Vitaliano Brandoli, titular de Atletas Discapacitados de Matanza (ADIMA) opinó en relación a las necesidades del sector que representa y remarcó que “el discapacitado que hace deporte, generalmente, es porque ya tiene solucionado su problema laboral y económico, ya que de no ser así sería muy difícil que pueda desarrollar alguna actividad deportiva. Porque la discapacidad es más difícil de sobrellevar cuando recae sobre los sectores más carenciados, ellos son los que más dificultades económicas tienen, porque necesitan dinero o un auto para trasladarse, sin contar los elementos que su discapacidad requiere”, sin embargo aclaró que en los últimos años “se notó un avance importante en políticas de integración” y se refirió a los pases de transporte y pensiones.
La subsecretaría de Capacidades Diferentes y Previsión local, Nedda Abella expresó que “La Matanza tiene por lo menos el 15 por ciento de la población con algún tipo de discapacidad. En el 2001 se realizó un censo que no era exacto, ahora en el último censo se registró que en el Conurbano el 8 por ciento es discapacitado, mientras que en el Distrito estaríamos teniendo no menos del 15 por ciento, calculamos que cerca de 300 mil personas”.
“Acá atendemos a cientos de personas todos los días, que quieren informarse sobre sus derechos, pedir los pases o hacer denuncias, trabajamos para mejorar la calidad de vida de todas las personas discapacitadas del Distrito, sabemos que falta mucho, pero estamos trabajando para mejorar”, remarcó Abella.
Las estadísticas exactas acerca del número de personas con capacidades diferentes, permitiría abordar políticas públicas que integren de una manera más efectiva a ese sector en la sociedad. Datos que permitan develar las necesidades y apuntar a mejorar los servicios, para que el acceso a la salud, educación, transporte y trabajo deje de ser un derecho para pocos.
“Esperamos que se implemente pronto el censo, porque queremos coordinar algunas cosas con Nación. Hay que entender que necesitamos un censo propio, que sea realizado exclusivamente por nosotros para tener datos más precisos, para poder llegar a todos y cubrir todas las necesidades”, argumentó la funcionaria.
En esta línea ejemplificó que “en Ramos Mejía tenemos 18 escuelas especiales, mientras que tenemos solo 2 en Virrey del Pino y nosotros, por nuestro andar, por nuestro trabajo nos damos cuenta que en Virrey del Pino hacen faltan más escuelas, pero sin datos precisos no podemos decir que hagan más, necesitamos mostrar dónde está la necesidad y trabajar para cubrirla”.
Abella, reconoció que “en La Matanza se necesitan cosas en todos lados. No es lo mismo la situación educativa en Ramos Mejía y San Justo que en Virrey del Pino que recién se está
avanzando en escuelas especiales. Sabemos que nunca es suficiente, pero trabajamos para avanzar”.
En referencia a la dificultad de acceder a un sistema de salud, lamentó que el Programa Federal de Salud (PROFE), “funciona muy mal, evidentemente debería mejorar muchísimo su calidad, hay problemas con los turnos, farmacias, con la entrega de prótesis. La atención en la salud de discapacitados es una de las grandes cosas a mejorar. A esto se le suma que los hospitales no son suficientes para todos, por eso también apuntamos a la apertura de los nuevos hospitales”.
Por otra parte, opinó que “la dificultad de transitar las calles y veredas es un tema en el que se está trabajando, este año se han realizado miles de rampas. Había falencias enormes en ese tema y ahora se están realizando accesos en todos lados, además mejoró el acceso al pase de transporte, a las pensiones”.
Entre las tareas pendientes detalló que “falta mejorar en todo, siempre hay que mejorar la obra social es lo principal, después es necesario crear más escuelas, incentivar a la creación de más ONG´S porque trabajando en grupo se llega mejor. También hay que modificar los pases de transporte, se deben unificar y evitar que sean dos o tres pases” y reiteró que desde la cartera que lidera “se hace lo que se puede”.
El hospital Paroissien de la localidad de Isidro Casanova, es el único centro que otorga los certificados de discapacidad, por ello desde la subsecretaría se propone crear un triunvirato de médicos, para que no se hagan solo los certificados en el Paroissien”, y que les permita a los interesados poder acceder a ese servicio de una manera más práctica.
Más contención
Las situaciones que deben vivir algunos discapacitados se encuentran agravadas por la ausencia de un Estado que contenga y ampare, en este marco Abella, propone la creación de un lugar de tránsito en el que se atienda la urgencia y evite revictimizar a las personas.
“Veo desde mi función la gran necesidad de tener un lugar de tránsito de noche, porque a veces los mentales se pierden o hay violencia familiar que los expulsa de los hogares y necesitamos que esa noche el discapacitado tenga dónde pasarla”.
Explicó que actualmente se lo asiste de la “manera en que se puede” cuando surge algún caso, lo ubican en alguna sala de salud, el Policlínico Central de San Justo, una ONG´S, pero aclaró que “no debe ser así, tiene que haber un lugar especial y ese hogar no solo serviría para los discapacitados sino para la mujer golpeada, los ancianos perdidos. La idea es crear un espacio que nos permita tener a la persona hasta que ubiquemos a la familia. Hoy en día se refugian dónde pueden, pero debería existir un lugar tránsito para contenerlos”.
“A veces me llaman a las 2 de la mañana para avisarme que se encontró un discapacitado perdido, o alguno que se le rompió la silla de ruedas y necesitamos que exista un lugar que los refugie para que se higienicen, coman, duerman calentitos y nos permita a nosotros investigar al día siguiente dónde está la familia”, insistió.
Por los derechos
Desde la Subsecretaría de Capacidades Diferentes y Previsión, se articula con la Defensoría del Pueblo de La Matanza para manejar las denuncias que reciben, se pide y trabajan de manera mancomunada para amparar y asesorar a las personas que presentan algún reclamo por discriminación, falta de accesos, vulneración de derechos, entre otros.
Entre las denuncias recibidas detalló que “se informa sobre abusos, como puede haberlo en todos lados, pero lo que notamos es que predominan los abusos económicos y esta situación es abalada por el gran desconocimiento de los discapacitados acerca de cuáles son sus derechos, por eso nosotros los asesoramos y los incentivamos a que se capaciten e informen”.
Finalmente se refirió a las limitaciones que la sociedad impone a la población discapacitada y manifestó que “desde este lugar (la Subsecretaria de Capacidades Diferentes y Previsión) trabajamos para que no sea el sector más marginal de la sociedad, pero desde la sociedad todavía falta mucho, falta entender que el discapacitado tiene derecho a estar en igualdad de condiciones. Notamos que falta maduración social, además es imprescindible que los discapacitados se informen sobre sus derechos”, explicó.
Porque los discapacitados no solo tienen que superar las limitaciones que le impone su cuerpo, si no también se encuentran con barreras sociales y culturales, con una mirada del otro, que los discrimina y muchas veces les impide lograr el avance laboral, deportivo, cultural, entre otros. Según coincidieron las fuentes consultadas por S!C “todos estos obstáculos se pueden superar si los gobiernos, las organizaciones no gubernamentales, los profesionales, las personas con discapacidad y sus familias trabajarán de manera coordinada para fomentar y crear políticas públicas de inclusión e integración”.
Por un deporte que integre
El Distrito ofrece una serie de lugares en los que se practican actividades deportivas para personas con capacidades especiales y de esa manera trabajar para lograr una integración mayor.
Vitaliano Brandoli, es el presidente y fundador de Atletas Discapacitados de Matanza (ADIMA), que es una entidad de bien público que fue fundada en 1986 y capacita en básquet y tenis de mesa. Actualmente refuerzan la lucha por conseguir un espacio físico para desarrollar el trabajo.
“No tenemos sede propia, realizamos las actividades en diferentes lugares que nos prestan otras instituciones. Hace años buscamos un espacio pero aún no lo logramos, pedimos a la Intendencia y estamos a la espera de que se pueda cumplir con ese sueño”, expresó el titular de ADIMA.
Con respecto a la relación con la Subsecretaría de Personas con Capacidades Diferentes y Previsión local, celebró que existe una “buena relación, pero ahora nos informaron que pasamos a depender de la Subsecretaria de Deportes, por eso esperamos las novedades que nos ayude a avanzar”.
Mientras que el CEDIMA, es el Centro de Discapacitados de La Matanza, su sede está en Arieta 3950, y en el participan más de 200 personas con distintas capacidades.
Según comentó a S!C Leonardo Mariño, titular de la entidad “en estos años de existencia dejamos un legado cultural” y resaltó que “este año se ofrecerá rehabilitación a través del deporte, el trabajo y la educación, todo absolutamente gratuito”.
Por otra parte, destacó que se siente orgulloso de ser parte de los “formadores de deportistas Paralímpicos” es de recordar que tres de los deportistas de la institución competirán en los Juegos Paralímpicos Londres 2012, entre el 29 de agosto y el 9 de septiembre.
Según comentó “Marta Makishi, Gisela Muñoz y Gabriel Copola, son los matanceros que representarán al país en la disciplina de tenis de mesa”.
Otro de los lugares es el Centro de Discapacitados de Isidro Casanova, (CEDIC) ubicada en Monte Egmont 131 y fundada en 1982, y su objetivo es “trabajar con discapacitados del aparato locomotor; integrándolos en la sociedad cultural y laboralmente, enfatizando la sociabilidad”.
En esa misma localidad existe la Asociación Discapacitados Isidro Casanova (ADISIC).
Fundada en el año 2000. Y su sede está en Islas Malvinas 2846. Su objetivo es lograr la inserción del discapacitado con sus pares, así como su desenvolvimiento con los mismos. Esta asociación nuclea todo tipo de discapacidad (motrices, ciegos, disminuidos visuales, mentales, sordos).
Juegos para todos
El Distrito de La Matanza comenzó a ofrecer juegos integradores y bio saludables en diferentes plazas y espacios públicos con el fin de lograr la integración de los pibes con capacidades diferentes.
Las plazas que hasta el momento cuentan con estos equipamientos son la Plaza de San Justo, la Plaza 8 de Octubre de Gregorio de Laferrere mientras que en el Ateneo Don Bosco de Ramos Mejía, ya están instalados equipos bio saludables para que los concurrentes a ese espacio de ejercitación los puedan usar.
El proyecto es el de lograr complementar estos juegos con los que ya se encuentran instalados en las plazas, con el objetivo de que cada uno de estos espacios públicos cuente con juegos de plazas tradicionales, juegos para chicos con capacidades diferentes y equipos para ejercitación.
Preparan la segunda encuesta nacional de personas con discapacidad
En el marco del trabajo preparatorio para realización de la Segunda Encuesta Nacional de Personas con Discapacidad (ENDI II), se llevó a cabo la segunda reunión de consultas con organismos gubernamentales, asociaciones civiles y ONG’s ligadas a la temática sobre personas con discapacidad.
La misma tuvo lugar en la sede del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), con vistas a la realización de la primera prueba piloto, en los meses de octubre y noviembre próximos.
Se recopiló información y opiniones de las organizaciones invitadas a fin de poder caracterizar a esta población de la mejor manera posible y brindar un aporte para el desarrollo de la nueva encuesta.