Luego de una larga agonía, a fines de 2014 ha dejado de existir un proyecto que supo comprender a unos pocos, pero que eran muy bien comprendidos, hasta que dejaron de serlo. Como dice la canción: “Todo concluye al fin, nada puede escapar, todo tiene un final, todo termina…”.
El espacio que presentaba como referente al exconcejal radical Manuel Atencio (quién en los últimos años tuvo una relación amistosa con el Gobierno local), ha dejado de existir. Así lo hicieron saber los correligionarios que brindaron un caluroso saludo al exedil en la plaza de San Justo luego de que Atencio fuera derrotado en las internas partidarias que, paradójicamente, terminaron “part-iendo” su espacio. Hasta pronto Manuel… (Gritan desde el Comité de la calle Marcón).