La Brigada interna de Emergencias de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) inició un nuevo año de actividades de entrenamiento con ensayos del uso de cardiodesfibriladores.
Compuesto por personal de diferentes áreas de la Universidad, el grupo de voluntarios, también, fue capacitado en la actuación ante accidentes causados por sustancias químicas, con la coordinación del responsable de Seguridad e Higiene de la UNLaM, Gustavo Barisone.
“La verdadera acción de un grupo interno nos garantiza actuar en minutos, antes de que se pierdan vidas; o anticipadamente a que nuestro establecimiento pueda estar corriendo riesgo”, señaló el experto.
Asimismo, destacó el trabajo realizado por la Brigada en las prácticas del año pasado: “Actuaron muy bien y nos otorgaron grandes beneficios desde el punto de vista de protección a las personas y a las instalaciones de la Universidad”. Y resaltó la vocación de los voluntarios que “están predispuestos a verificar, día a día, que no se provoquen situaciones de riesgo y a intervenir si fuese necesario”.
La creación de una Brigada interna de Emergencias es una iniciativa de la Dirección de Recursos Humanos que se lanzó en el 2014. Tiene la finalidad de abordar, de manera integral, acciones de emergencia como primeros auxilios, rescate, conocimiento de los tableros eléctricos, identificación de salidas de escape y accesos de la Universidad, lugares de corte de suministro de gas y la identificación y gestión de riesgos químicos.