Por Gastón Romero
Del legendario realizador Sam Raimi (“Spider-Man”,“EvilDead”) y el director Gil Kenan (“MonsterHouse”), este film es la versión contemporánea del clásico de 1982, acerca de una familia cuya casa en los suburbios está embrujada por fuerzas malignas.
Cuando apariciones aterradoras incrementan sus ataques y mantienen secuestrada a la hija más pequeña, la familia deberá unirse para rescatarla antes de que desaparezca para siempre.
Kenan dirige a partir de un guión del escritor ganador del Premio Pulitzer David Lindsay-Abaire.
Protagonizada por Sam Rockwell (“Confesiones de una mente peligrosa”), Rosemarie DeWitt (“El casamiento de Raquel”), Jared Harris (“Mad Men”) y Jane Adams (“Eterno resplandor de una mente sin recuerdos”).
El film promete todo el terror esperado y más y se da a la tarea de actualizar una marca icónica, para contar la historia clásica de la casa embrujada, que apela a nuestros miedos más profundos. Presenta a una familia como la nuestra, un hogar como el nuestro —pero uno que se encuentra atrapado dentro de una trampa sobrenatural. La película fue rodada en 3D original, lo que ayuda a intensificar los sustos que presenta, así como las emociones generadas por el suspenso, que te tiene a la orilla del asiento.