El menor había sido arrancado de su entorno familiar en mayo de este año, mediante un escandaloso operativo que se llevo a cabo en el jardín de infantes al que concurre el nene de 5 años. Valeria Sainz Moreno, madre del pequeño, había denunciado más de 30 veces a su ex pareja y padre de Jano, por ejercer violencia contra ambos. La jueza que llevaba adelante la causa, decidió otorgarle la custodia a la abuela paterna, luego de un fallido intento de re vinculación.
Luego de 120 días, Jano fue restituido a su mamá, Valeria Sainz Moreno, de quien había sido arrancado en mayo último, mediante un escandaloso operativo que se realizo en el jardín de infantes al que concurre el menor, ordenado por María Petrona Martínez, titular del Juzgado de Familia N° 5 de La Matanza.
“Lo devolvieron a su vida, a mis cuidados. Detectaron toda la violencia que sufrió desde el día en que se lo llevaron y que el nene tiene un trauma muy grande, al igual que yo”, contó Valeria Sainz Moreno, que había denunciado a su ex pareja y padre de Jano por la violencia ejercida contra ambos.
A pesar de las denuncias, la magistrada había ordenado la revinculación con su padre. Pero el nene se negaba por el temor que le tenía, y sigue teniendo, a su progenitor. Entonces, la magistrada establece que hay “inhibición de contacto con su padre” e impide todo tipo de vínculo con su madre.
La causa de Valeria por violencia de género, había pasado por el Juzgado N° 4 de La Matanza, en ese momento a cargo del Juez Juan Manuel Delfino. Ante el nulo accionar del funcionario de la Justicia, la mujer lo recusó y magistrado fue separado de la causa, que cayó en las Manos de María Petrona Martínez.
Según había contado Valeria Sainz Moreno, desde un primer momento la magistrada le había advertido que “no iba a perdonar lo que le había hecho a su amigo Delfino (por el juez recusado)” y que para Valeria “comenzaba la noche”, le habría dicho durante el primer encuentro que tuvieron.
Luego de tres años de irregularidades y la arbitrariedad de la magistrada, Sainz Moreno pidió la recusación de la jueza, que finalmente re apartó de la causa. Y el proceso continúa, ya que los asesores letrados piden un jury y la destitución de la magistrada.
“Ahora me quiero enfocar en mi hijo, pero llegado su tiempo se tomarán las acciones correspondientes para cada persona que lo dañaron”, dijo la mamá del nene, que además agradeció el apoyo de las organizaciones que la acompañaron y seguirán haciendo en este proceso.
Tras el apartamiento de la magistrada María Petrona Martínez, la causa pasó al Juzgado de Familia N° 1 a cargo de Daniel Di Tada, que el 14 de agosto, permitió el contacto de Valeria con su hijo. “Lo contuvieron y el nene perdió el miedo, pudo contar todo lo que vivió en este tiempo”, destacó Valeria. En tanto, el papa del menor por el momento no ver a su hija y la Justicia determinó que debe someterse a un tratamiento de control de la violencia.
“Hoy no me alcanzan las palabras para agradecer a todos los que nunca me dejaron, a todos los que nos acompañaron en esta lucha tan dolorosa y traumática para mi hijo y mi persona. Jano volvió a su casa, le devolvieron la vida. La cual fue interrumpida por personas incompetentes y con maldad”, manifestó Valeria a través de las redes sociales. .
Pero además de agradecer y festejar la resolución de su caso, la mujer advirtió: “está justicia tiene que cambiar, o mejor dicho se tiene que aplicar. Hay muchos Janos y Valerias ahí afuera esperando volver a reencontrarse”.