Mataron a golpes a una jubilada de 75 años en Isidro Casanova: estaba atada de pies y manos

Yolanda Guillermina Navarro fue asesinada en la víspera de Navidad en su casa de la localidad de Isidro Casanova. La Policía Bonaerense descubrió su cadáver ayer domingo, atado de pies y manos. Tenía 75 años. Era viuda y no tenía hijos. Se sospecha que fue asesinada en el marco de un violento robo.

Sus vecinos del barrio la habían invitado a una celebración para que no pasara la Noche Buena sola pero nunca apareció.

Si bien en un primer momento pensaron que la mujer había cambiado de planes y aceptado asistir a la cena que habían organizado unos familiares en la Ciudad de Buenos Aires, el domingo por la tarde se encendieron todas las alarmas de su paradero cuando su sobrino se presentó en su domicilio porque no le contestaba el teléfono. Como tampoco atendía el timbre, rápidamente dio aviso a la policía.

Cuando los efectivos arribaron al lugar constataron que una ventana trasera correspondiente a la habitación de Navarro se encontraba con signos de haber sido abierta con un barrote. La mujer, en tanto, permanecía asesinada; atada de pies y manos.

Además, varios ambientes de la propiedad tenían un gran desorden, por lo que se cree que la mujer habría sido víctima de un robo, aunque no se detectaron objetos faltantes.

A raíz de los testimonios de los vecinos se pudo establecer que la mujer había sido vista por última vez ese mismo día, cerca de las 20 horas. Además de su jubilación, Navarro vivía de la pensión de su marido y de un alquiler; por lo que su sobrino no pudo precisar si los delincuentes se llevaron dinero.

Desde el entorno de la víctima también sospechan que los delincuentes podrían ser vecinos del barrio. Al haber sido reconocidos por la mujer, posiblemente la mataron. También se cree que el móvil del crimen podría haber estado motivado para adueñarse de la vivienda ya que no tenía herederos directos.

Aunque aún resta saber el resultado de la autopsia, el médico legista que intervino en el hecho constató que su muerte se habría producido el viernes por la noche.

En el caso interviene la fiscal Karina Licalzi, de la Unidad Funcional de Instrucción de Temática de Homicidios de La Matanza, que ordenó las pericias a cargo de la Policía Científica y el relevamiento de cámaras de seguridad para dar con los sospechosos.