Atleta de Casanova quiere realizar un evento para difundir el Wushu


Maximiliano Rodríguez tiene 25 años y vive en Isidro Casanova. Desde los cuatro años practica artes marciales y en el 2008 fue el único representante argentino de Wushu en los Juegos Olímpicos de Beijing. Recién llegado de China ya tiene en mente poner en marcha la creación de un show artístico cuya base está fundada en el arte marcial del Wushu.

Por Cinthia Bistolfi
cbistolfi@periodicosic.com.ar

El encuentro se pautó en las oficinas de S!C. Muy puntual, Maximiliano Rodríguez se presentó a la hora acordada. Agradable, simpático y respetuoso se mostró mientras compartía con S!C sus logros, intereses y proyectos, en definitiva, su historia de vida.

¿Cuándo comenzó tu pasión por las artes marciales?

De chico era súper hiperactivo y mi familia se preguntaba qué podía hacer conmigo para que me calme un poco así que, por iniciativa de mi papá, decidieron llevarme a aprender artes marciales. Así fue como empecé y pasé por varias escuelas argentinas de artes marciales, la primera fue Chaiu Do Kwan, donde obtuve mi primer cinturón negro en categoría infantil. Después continué en la escuela Wai Kung Pai Kung Fu donde conseguí mi segundo cinturón negro y, finalmente, estuve en la escuela Tao Chuan que pertenece a la Federación Argentina de Wushu Kung Fu (FAWK), donde adquirí el título de Profesor y Técnico Nacional de Wushu. En el 2002, luego de varios años de aprender y competir, tanto nacional como internacionalmente, llegué a la FAWK que es la única institución argentina de Wushu que es reconocida a nivel nacional e internacional.

¿En qué consiste el entrenamiento de Wushu?

El entrenamiento de Wushu de la parte de formas se puede dividir en tres grupos: está la parte de la condición física, la parte de la técnica y la parte de la performance o de la actuación dentro de la rutina. Esos tres grupos son los que van a marcar tu desempeño dentro de la competencia. Este es un deporte que se destaca por ser veloz y artístico y que se puede confundir, incluso, con un baile aunque entiende la esencia del arte marcial. Por otro lado, está la parte de la condición física cuyo fin está destinado a mejorar la técnica lo mejor posible y que, a su vez, el objetivo consiste en concluir la rutina con la misma fuerza, potencia y rapidez con la que comenzaste. Básicamente en esto consiste, a grandes rasgos, el entrenamiento del Wushu.

¿Cómo fue tu participación en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008?

Participé en Beijing 2008 que fue una competencia principalmente de exhibición y demostración de Wushu que se dio dentro del marco de los Juegos Olímpicos. Cada país sede de los JJ.OO. tiene la posibilidad de incluir un deporte siempre y cuando el Comité Olímpico lo avale, así que en este caso China optó por Wushu para mostrarle al mundo este deporte no tan conocido. El Wushu no es reconocido a nivel internacional a comparación con otras artes marciales como Taekwondo, Judo o Karate que tienen mucha más trayectoria. La Federación Internacional de Wushu recién se fundó en 1991 por lo que tiene muy poca historia en relación a otras disciplinas aunque, de todos modos, el crecimiento de este deporte ha sido rápido y generalizado en este poco tiempo. Actualmente muchos atletas viajan a China para capacitarse y muchos deportistas chinos viajan a otros países para enseñar este deporte.
El Wushu es un deporte reconocido por el Comité Olímpico Internacional y está en la lista, junto a otros cinco deportes, para ser elegido el año que viene por este mismo comité para formar parte de los Juegos Olímpicos de 2020 así que vamos a cruzar los dedos para que sea considerado deporte olímpico.

¿Cómo fue que optaste por el Wushu porque, como dijiste recién, es un deporte relativamente nuevo?

Fue mucha iniciativa de mi viejo. Hubo un tiempo, cuando empezamos a ir a FAWK, en que yo estaba desmotivado. Dos años después se hizo el 1º Campeonato Sudamericano de Wushu en Argentina, donde competí y gané medalla de oro y, unos meses después, se realizó 8º Campeonato Mundial de Wushu en Vietnam y tuve la posibilidad de viajar y ver en vivo a atletas de Wushu chinos. Esa fue la primera vez que vi atletas de esa magnitud y categoría por lo que me volví a motivar y me di cuenta que esto realmente es lo que quiero y me gusta.

Tengo entendido que acabas de volver de China, ¿en qué consistió este viaje?

A fines de abril de este año viajé a China. Las veces que había ido siempre fue por competencias y esta vez fue con el objetivo de aprender y entrenar otros estilos y corregir lo que ya sabía, esto marcó el inicio del nuevo Maxi. Puedo decir que es mi tercer gran cambio. El primero fue la motivación que me habían generado el poder ver a los atletas chinos en el Mundial de Vietnam que con eso me di cuenta que yo quería vivir de esto, el segundo gran cambio fue haber participado en los JJ.OO. de Beijing 2008, lo que cambió un montón mi forma de pensar y de ver las cosas y, finalmente, fue haber vivido varios meses en Canadá y China. Canadá fue clave en el cambio y muy productivo. Allí, luego del 10º Mundial de Wushu, tuve la posibilidad de entrenar con selección de Wushu canadiense, donde aprendí un montón. Además, paralelamente ayudaba a un chico que padece autismo y logré cambios positivos en él porque, a través del deporte, pudo descargar tensiones que anteriormente eran reflejadas con signos de violencia. Y en China estuve en la provincia de Xian y entrenaba en el Instituto de Zhao Changjun. Mi coach fue Ma Chao, quien formó parte del Cirque Du Soleil durante cinco años y, además, fue coach en Japón, Holanda y China. Ese tipo de experiencia era lo que necesitaba, en especial, de la mano de alguien que haya sido atleta profesional y artista de Wushu.

¿Cuáles son tus metas respecto a este deporte?

Por un lado, está la idea del espectáculo y por el lado deportivo, la idea es comenzar a competir nuevamente. Tengo que planear el ciclo deportivo, ver el calendario de competiciones nacionales e internacionales. Además, me gustaría encontrar un lugar donde pueda entrenar mejor o apropiadamente. Ahora, lo que más quiero es seguir evolucionando en mi nivel, tanto de persona como de Wushu, y las competencias yo sé que van a llegar solas, por ahora no tengo un plan específico porque recién volví de China así que sé que en el momento justo se va a dar todo para volver a competir.

Para cerrar, ¿qué otros planes tenés en mente para concretar?

Tengo una aplicación hecha en el Cirque Du Soleil. Envié videos con todos los requisitos que ellos solicitan para un artista que quiera entrar en escena al Cirque Du Soleil, así que entregué mi material junto a mi CV para que se pongan en contacto conmigo en caso de requerir a alguien con mi perfil. Posiblemente a fin de año haya una audición en Brasil en la que me voy a presentar. Todavía hay que esperar, yo estoy tranquilo y pienso en que lo importante es seguir a pesar de los resultados y de ir adquiriendo nuevos conocimientos. Por otro lado, el último viaje a China también cambió mi visión de ver las cosas y marcó el inicio de la creatividad dentro de mí. Así que tengo en mente la creación de un show y ver si lo puedo llevar a un teatro. La idea original es que sea un show de entretenimiento y que tenga como base el Wushu, además, la idea es incluir otros números para que el show sea variado y no monótono. En Argentina no existen este tipo de eventos, por eso es que quiero probar y, a su vez, dar a conocer el Wushu a través de un show artístico.

Deja una respuesta